Hilos de pensamiento, tratando de coser la burda realidad.
Cuentos cortos, que poco interesan a los burgueses y mercaderes.
Cuestionamientos sobre el circulo del vivir-desear-sufrir en el que estamos atrapados.
Exposiciones condimentadas con el humor, que es la sal. Y si bien sabemos que la comida sin sazón resulta desagradable, mucho peor es comer sal sola.
viernes, 17 de septiembre de 2010
Qué tiempos aquellos...
¿Te imaginás los padres primerizos de acá a 10 años? Me imagino a la madre joven, a los gritos, sacando rápido la olla del fuego:
_Nene, ya que estás ahí, haceme el favor, fijate en Google; poné ¿cómo hacer para que no se peguen los fideos?_
2 comentarios:
jajaja soy padre "tercerizo", pero la situación es tal cual, google está omnipresentemente
ESO YA LO HACEMOS AHORA, JA,JA
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