Bebe la mar de las aguas del río,
brindan por siempre en acto sonoro.
Beben las piedras en ésos meandros
que va dibujando el cántaro acuoso.
Beben las garzas y rosas flamencos,
miles de cebras también a su antojo.
Posan los cuerpos cerca del lago
y sacian su sed, los mounstros dichosos.
Bebe la Luna la luz del Poniente
y las estrellas su blanca porfía.
Sorbe la Tierra la humedad del Viento
y brindan las rosas y las margaritas.
Bebe la lluvia, la verde pradera.
Los montes absorben del cielo, la vida.
Un niño se aferra al pecho materno
y obtiene, tan frágil, la gracia infinita.
Si liba Natura nuestros blancos huesos,
si el Tiempo, borracho, la vida nos quita.
Si chocan las copas los dioses, ufanos;
y con un negro elíxir, riendo, ellos brindan.
Si todo se bebe en este planeta.
Si un caos silente nos tomará a prisa.
Si un negro agujero se tragará el mundo...
¿Por qué tú, mi amigo, el vaso mezquinas?
1 comentario:
Otro deleite para el alma... nada mas... bueno... aunque, lo que escribiste merece mucho mas, creo que "eso mucho mas" lo palpite aqui dentro... cosa que creo no poder describir...
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